No tengo un trabajo tan común, desde hace ya casi un año estoy dentro de una organización que combate la pobreza extrema en niños, podría pensarse que estoy cambiando de cierta forma al mundo, tal vez no sea ese el caso, pero lo cierto es que me encanta lo que hago, conocer a más de doscientas personas diferentes cada día, escuchar historias, ver sonrisas y dar la mía (:
..hacen que cada día valga la pena.
Tengo poco más del año viviendo totalmente sola en esta ciudad, y creo que lo mejor que me ha dado fue amor, amor por lo que hago, por mi trabajo, por pasar tiempo conmigo, por una persona en especial que me enseñó tantas cosas y al final terminó por romper mi corazón, y es esto último lo que ha hecho que quiera salir huyendo algunos días, por que después de sentir tanta compañía es difícil acostumbrarse nuevamente a la soledada, aunque de cierta forma la soledad no es tanta si se aprende a vivir acompañado (contradicción tan linda), si te das cuenta de que en realidad no estás solo, si volteas alrededor y miras que aún existen mil colores.
Por eso hoy lunes disfruté mucho estar con cierta personita, comprando, viviendo, ríendo.
Todo comenzó con un buen desayuno, omelette de champiñones y jamón, con un toque de mi pasión en la vida.. La Catsup.
Un postre en la nevería, un helado de piñón.
La compra más linda para ser usada en semana santa!
Accesorios, placer culposo!
Pequeñas cosas que hicieron mi día Lunes, y con esto comienzo un diario de 12 días!
Cuenta regresiva..hacia la felicidad (:
